viernes, 18 de septiembre de 2009

Las redes para tiburones, los verdaderos asesinos del mar

En los años 50, la costa más popular de Sudáfrica se estremeció cuando cinco personas fueron atacadas por tiburones en unos pocos días. Para evitar el pánico entre los veraneantes, las autoridades instalaron redes para tiburones que impedían que estos llegaran a la costa. A lo largo de todo el litoral de Kwazulu-Natal, decenas de redes atrapaban y mataban centenares de tiburones y otros animales cada año. Hoy en día, algunas de estas redes aún están en uso.





En diciembre de 1958, el resort turístico de Margaret fue presa del pánico: en menos de dos semanas 5 personas sufrieron mordeduras de tiburón y pusieron en peligro el turismo, el motor económico de la zona. Las autoridades decidieron tomar cartas en el asunto y después de haber probado infinidad de veces con las cargas de profundidad decidieron implantar un sistema más efectivo para acabar con los tiburones: las redes.





Después de aquel diciembre negro, decenas de municipios de la costa índica de Sudáfrica instalaron redes de unos 200 metros de longitud a unos 400 metros de la costa. Entre 1960 y 1970, la longitud de las redes creció de 2 a 31 quilómetros y su efectividad quedó fuera de toda duda. De 1978 a 1998 las redes atraparon aproximadamente 33.684 grandes tiburones, de los que un 12% fueron liberados en vida.


Entre las especies con mayores capturas figuran el tiburón arenero (Carcharinus obscurus) y los peces martillo (Sphyrna lewini. S. zyagena y S. mokarran), los dos con casi 7.000 capturas. Les siguen el tiburón toro (Carcharias taurus) y el tiburón de puntas negras (Carcharinus limbatus) con 5.000 y 3.000 capturas respectivamente. Además, las redes han afectado a otras muchas especies como la manta gigante (Manta birostris), el tiburón tigre (Galeocerdo cuvier), el tiburón blanco (Carcharodon carcharias) o el tiburón ballena (Rhincodon typus).


Además de tiburones las redes han atrapado a muchas otras especies. Desde 2004 este sistema ha capturado unos 50 tortugas y delfines y 5 ballenas cada año. Debido a la presión social, la organización encargada de la gestión de los tiburones en las costas surafricanas (Natal Shark Board) para reducir las capturas de cetáceos y tortugas y de aquellas especies de tiburones que no son consideradas peligrosas.




En 2007, la entidad empezó a sustituir las redes por sedales con anzuelos, método que ha reducido casi a cero las capturas de otras especies marinas que no sean tiburones. No obstante, estos dispositivos han incrementado exponencialmente la muerte de algunas pequeñas especies de elasmobránqueos como los tiburones areneros. Algunas organizaciones de surfistas han mostrado su preocupación por la efectividad de estos sistemas ya que el uso de cebos puede acabar atrayendo más tiburones a la costa.





La industria del buceo alrededor del tiburón es una de las actividades económicas más rentables de esa zona y está valorada en unos 2 millones de dólares anuales, así que cualquier amenaza para estas especies debe ser tomada en serio. Las redes son culpables de la casi extinción de especies como el tiburón del Zambeze (Carcharinus leucas) y el declive de muchas otras. Hace falta investigar en sistemas como el sónar que permitan compatibilizar el ocio en las playas con la presencia de los grandes depredadores del mar.


Adaptación del artículo de Thomas P. Peshak de Save Our Seas para la revista African Geographic.

jueves, 17 de septiembre de 2009

Más de 50 calderones aparecen muertos en la Patagonia

Más de 50 calderones negros (Globicephala melas) han sido encontrados muertos en los últimos días en Bahía Bustamante, en la provincia patagónica argentina de Chubut. El varamiento masivo fue detectado el pasado domingo por la técnicos de una empresa de procesamiento de algas que alertaron al Centro Nacional Patagónico (CENCAT). Por el momento, se desconocen las causas de la muerte masiva de calderones; una especie que no habita las costas de Chubut.




Desde el lunes, especialistas del CENCAT recorren los cinco kilómetros donde se han detectado varamientos para determinar la causa de la muerte. Los habitantes de Chibut tratan con especial respeto a los cetáceos, al tratarse del principal atractivo turístico de la región. Cada año, unos 100.000 turistas acuden a Puerto Madryn, en la Península Valdés, para observar el apareamiento de la ballena franca austral (Eubalaena australis) sin necesidad de adentrarse en el mar.




Fuente: Pueblo en línea

lunes, 14 de septiembre de 2009

El documental "The cove" consigue frenar en parte la cacería de pequeños cetáceos en Taiji

El impactante documental "The cove", presentado con gran éxito en el Festival de Cine Independiente de Sundance de este año, ha conseguido una enorme repercusión de la matanza anual de delfines y calderones que cada año se produce en el pueblo de pescadores japonés de Taiji. Gracias al film, este año gran parte de los 100 delfines mulares (Tursiops truncatus) capturados durante la segunda semana de setiembre serán liberados. No obstante, unos 50 calderones (Globicephala melaena) han sido cazados para vender su carne y algunos delfines serán vendidos a acuarios.



La película narra como los pescadores japoneses atraen a los delfines a una cala mediante barras de acero y los cazan en un espacio cerrado que impide su escapada. La carne de delfín es muy apreciada en Japón y este animal ha sido cazado durante centenares de años en el país nipón. La carne de un delfín puede llegar a ser vendida por 500 dólares y su precio puede ser 10 o 20 veces mayor si se vende vivo a un acuario. Otra de las razones que han motivado la suspensión de al cacería ha sido las sospechas de que la carne de estos cetáceos está contaminada y no está en condiciones de ser comercializada.




Fuentes: Sea Shepperd, National Geographic, Save Japan Dolphins

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Las algas invasoras llegan a Cabrera

Los biólogos del Centro de Estudios Avanzados de Blanes han detectado la presencia de tres nuevas especies de algas alóctonas en la isla balear de Cabrera. Se trata de las especies Lophocladia lallemandii, Womersleyella setacea y Caulerpa racemosa; esta última ya fue estudiada por la Fundación CRAM en los fondos marinos de Eivissa y Formentera en el 2008.


Un biólogo del CRAM estudiando el límite de profundidad de la Caulerpa en aguas de Formentera

La primera noticia de estas tres algas en Cabrera tuvo lugar en el 2003, cuando un aficionado alertó de la presencia de especies invasoras. Según el biólogo marino del CSIC, Enrique Ballesteros, las invasoras en Cabrera han tenido un ascenso brutal y luego se han frenado, aunque cada especie sigue su patrón. La Lophocladia lallemandii proviene del Mar Rojo y se distribuye entre los 5 y los 35 metros de profundidad, desplazando a comunidades de algas fotófilas y praderas de Posidonia oceánica. Por otro lado, la Caulerpa racemos es originaria de Australia, desarrolla una mayor biomasa entre los 25 y 50 metros; mientras que la indopacífica Womersleyella setacea aparece siempre por debajo de los 25 metros.


Ejemplar de Caulerpa racemosa

La Posidonia, gracias a su densidad, resiste bien a las tres invasoras ya que són más pequeñas y pierden en competencia por la luz. Al contrario que la nacra (Pinna nobilis), que sufre la incrustación de la Lophocladia sobre sus conchas llegando a provocar su ahogamiento. A la espera de como reacciona todo el ecosistema autóctono, los investigadores han podido observar como la salpa y los erizos comen Caulerpa, lo que puede actuar como un mecanismo de control.

Fuente: El Mundo

martes, 8 de septiembre de 2009

Rescatada una ballena franca glacial en Porstmouth

El pasado viernes, una ballena franca glaciar (Eubalaena glacialis) fue asistida en la localidad estadounidense de Portsmouth (New Hampshire) despúes de haber quedado enmallada en redes y cuerdas de pesca. Se trataba de un ejemplar de 40 toneladas que fue avistado por un pescador que dio el aviso de alarma a los guardacostas.




El equipo de rescate del Centro de Estudios Costeros de Provincetown encontró al animal atrapado en una cuerda sintética que envolvía su mandíbula superior tres veces y arrastrando un pesado aparejo de pesca debajo de su cuerpo. Para proceder al rescate fue necesario la aproximación con una embarcación de 12 metros cuando el ejemplar salía a la superfície para respirar y el uso de una vara de 9 metros con un garfio incrustado en su extremo para cortar la cuerda. Después de 40 minutos de trabajo el equipo de 3 personas consiguió deslizar la cuerda fuera del cuerpo del animal. Este tipo de rescates suponen un gran peligro ya que el animal puede revolverse o colisionar con la embarcación.



Se cree que la población de ballena franca glaciar del Atlántico Occidental se sitúa entorno a los 300 ejemplares y se desconoce si su población se mantiene estable aunque, en estas condiciones, esta especie podría extinguirse en 200 años. Sus principales amenazas son las colisiones con barcos y el enmallamiento con redes de pesca.

Fuente: The Boston Globe

lunes, 7 de septiembre de 2009

Nueva tortuga en el Centro de Recuperación

El pasado viernes los servicios de emergencias del CRAM recibieron una llamada de alerta del Club de Vela del Puerto Olímpico de Barcelona para atender a una tortuga boba (Caretta caretta) que se encontraba flotando en sus inmediaciones.



A su llegada los veterinarios del CRAM encontraron a una hembra de 69 cm de longitud de caparazón y 58.8 kg de peso que presentaba una estrangulación grave de la aleta anterior izquierda por un sedal grueso y una cuerda de rafia enredada también alrededor de la cabeza y parcialmente ingerida.



Hecho que demuestra, una vez más, los devastadores efectos que la contaminación marina tiene en las tortugas, pudiendo provocar su muerte por ingestión, enmallamiento o estrangulamiento.



En estos momentos, la tortuga, que fue bautizada por los voluntarios con el nombre de Arare, se encuentra bajo tratamiento y observación veterinarios. El equipo del CRAM le llevará a cabo radiografías valorará si la estrangulación es tan grave como para amputar la extremidad.



jueves, 3 de septiembre de 2009

Los agentes rurales interceptan a tres coraleros furtivos en Begur

Agentes rurales del "Departament de Medi Ambient i Habitatge de la Generalitat de Catalunya" interceptaron ayer a tres furtivos que habían extraído 13 kilos de coral rojo (Corallium rubrum) sin autorización y en una zona vedada de Begur. El hallazgo ha sido posible después de establecer un dispositivo de seguimiento e intervención contra el furtivismo mediante cuatro unidades de agentes rurales.

Material incautado a los furtivos

Los coraleros no tenían identificación ni documentación y faenaban en una zona de expresa prohición de pesca del coral situada en la costa del Montgrí, entre los municipios de l'Escala y Torroella de Mongrí. Se trata de un paraje donde aun no se ha observado una recuperación significativa del coral rojo.

Fuente: Departament de Medi Ambient de la Generalitat de Catalunya

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Recapturada la foca monje escapada de un centro de recuperación turco


Las turísticas costas de Bodrum, en la costa sur de Turquía cercana al Mar Egeo, vivieron un fin de semana movido con la noticia de la escapada de Badem, la foca monje (Monachus monachus) que se encontraba recuperándose en el centro del Grupo de Investigación de la Foca Monje del Mediterráneo (SAD - AFAG) en la bahía de Gökova.



Badem huyó el viernes del recinto construido expresamente para su recuperación y pasó todo el fin de semana interaccionando con bañistas, a pesar de las repetidas advertencias de los veterinarios del centro, que temen que el animal se aconstumbre a la presencia humana y dificulte su vuelta al medio salvaje.



Badem fue rescatada en diciembre del 2006 siendo una cría huérfana y liberada al cabo de unos 5 meses. Su presencia intermitente en la bahía de Gökova ha provocado múltiples interacciones con bañistas y sus posteriores recapturas.



SAD - AFAG ha registrado múltiples avistamientos de foca monje en los últimos meses. En la costa norte de la península de Datça, cerca de la bahía de Gökova cuatro focas fueron observadas en las rocas; además dos focas más fueron fotografiadas al lado de Bodrum, a 100 metros del puerto. Últimamente, dos focas monjes han sido filmadas también por submarinistas en Akkuyu, con uno de los ejemplares enmallado en una red a la deriva.

Roger Valls, prensa del CRAM

martes, 1 de septiembre de 2009

Polémica por el parque eólico marino de Chipiona

La aprobación de un nuevo parque eólico marino en Chipiona (Cádiz) ha vuelto poner de actualidad el debate entre los que creen ciegamente en las bondades de la energía eólica y los detractores que sugieren que su afectación en el medio ambiente es demasiado elevada.



En este caso, el proyecto de Las Cruces del Mar supondrá la generación de unos 1.000 megavatios anuales y, teniendo en cuenta que cada kilovatio de electricidad generada por energía eólica en lugar de carbón evita la emisión de 0,60 kg de CO2, los beneficios en la lucha contra el cambio climático son innegables.



No obstante, hay afectaciones en el medio marino que hay que tener en cuenta. La resolución 7.5 de la Convención para la Conservación de Especies Migratorias de Bonn del 2002 remarca distintos aspectos de un proyecto de energía eólica offshore que pueden tener afectaciones en la fauna marina:

- la destrucción o distorsión de las áreas de alimentación, reproducción y descanso de determinados animales.

- el incremento del riesgo de colisión de las aves.

- los campos magnéticos y eléctricos causados por los cables de conexión.

- la emisión de ruido y vibraciones dentro del agua.


Así pues, cada proyecto de energía eólica marina debe tener en cuenta estos aspectos para minimizar su afectación sobre las especies que habitan la zona. En este caso, la organización ecologista Oceana ya ha asegurado que el parque de Las Cruces del Mar se sitúa sobre “fondos arenosos de escaso valor ecológico” y que, de hecho, se trata de un área apta para esta actividad según el Ministerio del Medio Ambiente.



Según un comunicado de prensa de la misma organización, “con las observaciones que se recojan sobre el terreno y tras haber mantenido conversaciones con los diferentes agentes implicados en las últimas semanas, Oceana presentará una propuesta de conservación medioambiental para toda esta zona”. Así pues, cabe esperar los resultados de este estudio para valorar detalladamente el impacto de un proyecto que conlleva una inversión de 2.500 millones de euros y en el que participan la empresa Magtel, la Universidad de Cádiz y el Ayuntamiento de Chipiona.

Roger Valls, prensa de la Fundación CRAM

Delfín rescatado en Alicante

El domingo, la Cruz Roja de Guardamar del Segura (Alicante) consiguió rescatar con vida a un delfín que había varado en la playa. El animal tenía un corte en la aleta trasera y sangraba cuando intentaba nadar; además se encontraba desorientado. Pese a los reiterados intentos de la Cruz Roja por devolverlo al mar, siempre volvía a la orilla.


La asistencia de pequeños cetáceos en el agua requiere el uso de flotadores

Al quedar claro que requería de asistencia veterinaria, el animal fue inmovilizado durante 5 horas mediante flotadores hasta que llegaron los especialistas de "L'Oceanogràfic" de Valencia. El delfín fue sedado y traladado a un centro de recuperación. Ángel Gómez, coordinador de la Cruz Roja en Guardamar, aseguró que las piscifactorías situadas a tres millas de la costa atraen a delfines y marrajos, aunque no es habitual que estos lleguen vivos tan cerca de la costa.

Fuente: La información de Alicante