En el año 2007, el CEMMA (Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños) llevó a cabo un proyecto para recopilar información básica de los cetáceos en la costa cantábrica. Para ello llevó a cabo estudios de corrientes marinas en O Banco de Galicia, una elevación submarina de 4.400 metros situada a 120 millas de las costa gallega.
¿Como? Realizando un experimento con el lanzamiento de una botella con carta incluida para averiguar cuando tardaba en cruzar el oceáno. El recipiente lo dejaron en medio del Banco de Galicia el 17 de mayo del 2007. El pasado marzo, Linda Chris Ashley mandaba un mensaje desde Bahamas avisando de la llegada del mensaje.
Este hecho aporta información valiosa sobre las corrientes oceánicas y sus efectos en las migraciones de especies como tortugas marinas. Los científicos del CEMMA aportan el ejemplo de la tortuga laúd (Dermochelys coriacea) llamada Jamur marcada con satélite en Burari, Costa Rica, y que paso por la costa gallega el 29 de mayo del 2007; haciendo un recorrido de más de 6.000 quilómetros en apenas 8 meses. ¿Pueden otras especies de tortugas con menos actividad natatoria realizar estas largas travesías oceánicas sin ayuda de la corriente?
Según los investigadores, la información extraida del experimento de la botella puede revelar que especies como la tortuga boba (Caretta caretta) tardan solo de dos a tres años a cruzar el atlántico. Menos tiempo del que se pensaba. Y todo gracias a una botella.
Tras casi ser extinguida por la caza comercial, la ballena azul (Balaenopetera musculus) ha vuelto a migrar de la costa de California a la Columbia Británica y el Golfo de Alaska. Este hecho no se registraba desde 1965 hasta la actualidad, cuando científicos de NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) han registrado 15 casos de ballenas azules en la Columbia Británica y el Golfo de Alaska. Al menos 4 de estos ejemplares, fueron identificados como individos avistados previamente en la costa de California.
Este reestablecimiento histórico de la ruta migratoria del Pacífico puede deberse a cambios en las condiciones oceánicas que pueden haber llevado el alimento principal de esta especie, el krill, hacia aguas situadas más al norte. A principios del siglo XX, la actividad comercial de los balleneros diezmó la población de ballenas azules en toda la costa oeste; y afectó especialmente a la población del norte. Actualmente quedan de 5.000 a 12.000 ejemplares de esta especie; con la mayor población en la costa oeste de Estados Unidos, con 2.000 ejemplares.
El pasado fin de semana el Instituto Español de Oceanografía (IEO) mandó a Terranova (Canadá) al buque oceanográfico Vizconde de Ezra para evaluar el estado de las especies comerciales de sus caladeros. Este despliegue se suma al realizado el 16 de mayo con la partida del buque Miguel Oliver, que tiene por objetivo localizar hábitats bentónicos sensibles y evaluar sus posibles interacciones con la actividad pesquera en la misma zona.
Entre los dos desarrollarán durante 3 meses dos campañas oceanográficas simultáneas en las que se estudiarán más de 10.669 kilómetros cuadrados y se realizarán unos 450 lances de pesca. El objetivo del Vizconde de Ezra es estimar la abundancia de poblaciones y analizar los parámetros biológicos de las especies más importantes; mientras que el Miguel Oliver se dedicará a estudiar la geomorfología de los fondos en buscad de estructuras como montes submarinos o fuentes hidrotermales que puedan albergar ecosistemas singulares amenazados por las prácticas pesqueras con especies como corales de aguas frías, esponjas o gorgonias.
Los pescadores de la localidad valenciana de Cullera han capturado accidentalmente en menos de 24 horas a dos tiburones peregrinos (Cetorhinus maximus), una especie protegida por la Unión Europea.
La primera captura se produjo el jueves, un macho de 6,54 metros de largo y de 1.300 kilos y lo inusual fue que el viernes se produjo otro caso idéntico, con el enmalle en las redes de un pesquero de una hembra de tiburón peregrino de 7,35 metros y 1.800 quilos.
Según los pescadores de la zona, se ha producido el avistamiento de varias aletas de tiburones en la costa de Cullera por lo que podría tratarse de un grupo de tiburones peregrinos que ha encontrado alimento. El biólogo de la universidad de Valencia, Javiar Guallart, opina que se trata de un hecho altamente infrecuente ya que los tiburones suelen nadar a poca profundidad y las redes estaban a 70 metros bajo el mar; por otro lado, Guallar lamenta que no exista un protocolo para las capturas accidentales de tiburones para facilitar su estudio.
El tiburón peregrino está clasificado como "vulnerable" por la Unión Internacional de la Naturaleza (IUCN) y protegido por el reglamento 40/2008 de la Unión Europea. El artículo 6 reza que los buques comunitarios tendrán prohibido pescar, conservar a bordo, transbordar y desmebarcar tiburones peregrinos en las aguas comunitarias y no comunitarias. Además, el artículo 15 especifica que los buques pesqueros de terceros países están sometidos al mismo grado de prohibición en aguas comunitarias.
Respecto al caso de Cullera, algunas organizaciones ecologistas han exigido la sanción de las embarcaciones pesqueras implicadas.
Desde hace décadas existe un gran interés en remover el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera para almacenarlo en donde no pueda contribuir al calentamiento global. Esta práctica es conocida como “secuestro de carbono” y uno de los métodos que ha recibido más atención es la “fertilización oceánica”, que consiste en estimular el crecimiento del fitoplacton marino (microalgas).
Un equipo de científicos indios y europeos (Victor Smetacek de l'Alfred Wegener Institutefor Polar and Marine Research y Syed Wajih Naqvi, del National Institute of Oceanographyrealizaron el experimento bautizado como Lohafex(“loha”significa “hierro” en lengua hindi y FEX por “Fertilization Experiment”) a bordo del Polarstern, uno de los buques oceanográficos más avanzados del mundo.
Este experimento consistía en lanzar, sobre un remolino oceánico, 20 toneladas de sulfato de hierro disuelto en una área de 300 kilómetros cuadrados entre Argentina y la Península Antártida, con el fin de estimular el crecimiento del fitoplacton. La fertilización duró unas 30 horas y después, durante unos 40 días, se analizaron las consecuencias a diferentes profundidades.
El Ministerio de Investigación y Ciencia alemán detenía las pruebas antes de empezar debido a la presión recibida por parte de las organizaciones ecologistas. A finales de enero se autorizó de nuevo el experimento.El objetivo de Lohafex es atrapar el CO2 de la atmósfera mediante una multiplicación de la producción de las microalgas y así observar el crecimiento y disminución de los organismos.
El fitoplacton realiza la fotosíntesis y uno de sus efectos es que remueve el CO2 de la atmósfera. El carbono pasa a formar parte de estas microalgas, y eventualmente, una parte terminará hundiéndose y depositándose en el fondo del mar, ya sea como fitoplancton muerto (manera directa) o a través de la materia fecal o los tejidos de zooplancton muerto (manera indirecta).
Con este experimento se esperaba poder contener el calentamiento global pero los resultados obtenidos han sido muy pobres. El vertido de hierro estimuló el crecimiento de fitoplacton y por lo tanto, hubo un aumento en la captación de CO2. Sin embargo, atrajo también a diminutos crustáceos (copépodos y anfípodos, ambos pertenecientes al zooplacton) que se comieron casi todo el exceso producido.
Por lo tanto, no se ha demostrado ningún efecto en los niveles de CO2 capturados y se pudo observar que la tranferencia de CO2 hacia el fondo del mar fue mucho menor que en experimentos anteriores. La razón, ha explicado Victor Smetacek, es que “las algas más comunes en esta área no son resistentes a los crustáceos”.Las más afortunadas han sido las ballenas, ya que la multiplicación del fitoplacton ha favorecido el aumento del krill, su principal alimento.
El 8 de Mayo entró en vigor la veda del pulpo establecida por la Consellería do Mar. en Galicia La pesca de este cefalópodo en la rías gallegas estará interrumpida hasta el 6 de Julio, atendiendo a la normativa que regula el plan de recuperación de esta especie, pero el sector no dispondrá por el momento de ayudas económicas para afrontar su inactividad. Además, durante el periodo de veda, quedará prohibida la extracción de pulpo aunque se trate de actividades recreativas.
Las entidades del sector destacaron que las capturas de pulpo se redujeron un 60% en la última campaña, y los precios de origen han caído a la mitad. "No se recuerda una campaña tan desastrosa como ésta. Estamos en una situación muy especial, en una campaña catastrófica en todos los aspectos”, explicaron. El colectivo achaca este resultado a los efectos del hundimiento del 'Prestige' en el 2002, y al "descontrol administrativo" propiciado por la marea negra.
Algunos pescadores se preguntan si podrán soportar los dos meses de paro. De las 1.400 embarcaciones autorizadas para pescar pulpo, 600 se dedican continuamente a la actividad. Estos barcos capturarán salmonete, faneca, pescadilla, jurel, centolla y raya entre otras especies.
La parada biológica se enmarca en el Plan de Recuperación del Pulpo implementado por el Gobierno de Galicia, el cual expira el próximo 31 de diciembre.
El Congreso de Chile admitió a tramite el pasado 29 de abril un proyecto de ley destinado a proteger los ecosistemas marinos vulnerables que de aprobarse implicará la prohibición de la pesca con artes de fondo en las áreas donde afecte a los montes submarinos y obligará a la flota arrastrera a llevar observadores científicos.
Se trata de una iniciativa pionera en un país donde la normativa sobre la protección de los mares es casi inexistente y la variedad de ecosistemas marinos vulnerables muy amplia. En todo el litoral chileno existen al menos 118 montes submarinos y diversas formaciones milenarias de corales de aguas frías. Zonas como el Cordón de Juan Fernández y Cordilleras de Nazca, Salas y Gómez e Isla de Pascua poseen más de un 40% de endemismos para algunos tipos de especies, el nivel más alto encontrado para montes submarinos en todo el globo.
Los montes submarinos son montañas que se elevan del fondo del mar sin salir a la superficie. El asislamiento geográfico, la complejidad topográfica y las fuertes corrientes los convierten en ecosistemas únicos.
Como cada año por estas fechas, Cuatro y Massa se van de "vacaciones a la costa". Hicimos el traslado el jueves por la mañana y todo fue muy bien. ¡Mirad como disfrutan!
El pasado día 4 de mayo, una cría de foca ocelada (Phoca hispida) apareció en una playa al noroeste de Polonia. Afortunadamente, a menos de 5 minutos en coche se encuentra La Estación Marina de Hel, que se encarga del rescate y recuperación de los mamíferos marinos que aparecen en las costas polacas. El animal se encontraba en buena condición física, aunque parecía agotado y algo delgado. Hay que tener en cuenta que la subespecie que vive en el báltico se encuentro en latitudes mucho más al norte y al este (generalmente en los golfos de Botnia y Finlandia) y que la presencia de una cría de tan corta edad en playas tan al sur no es nada normal. De hecho, según nos comentaron los biólogos y la veterinaria del centro, era el primer ejemplar juvenil que asisitían en los más de 30 años de historia de la Estación.
Algunos miembros de la Fundación CRAM nos desplazamos hasta Polonia, con el objetivo de presenciar cómo La Estación Marina de Hel gestiona los rescates de pinnípedos, desde la recogida en la playa hasta su liberación, pasando por los tratamientos habituales y la dieta.
De entre los muchísimos proyectos que desarrollan en la Estación Marina (en colaboración con La Universidad de Gdansk), se está llevando a cabo un programa de cría en cautividad de foca gris (Halichoerus grypus), con el que intentan remontar el bajo número de ejemplares que han quedado después de un siglo de caza descontrolada (e incluso, a principios del siglo XX, remunerada por parte del govierno!).
Una bióloga explora la boca de un ejemplar sin esfuerzo, gracias al entrenamiénto clínico
Además, los ejemplares adultos que participan en el proyecto de cría, están entrenados para permitir procedimientos clínicos, cosa que minimiza el estrés y les aporta un enriquecimiento ambiental importante.
Volviendo a la pequeña foca ocelada, sólo decir que su estado es muy bueno después de 10 días de tratamiento de soporte y un seguimiento estrecho de la dieta. Tiene apetito y ha ganado 3kg en una semana. Pronto será juntada con las 2 crías nacidas este año en cautividad para que aprenda a capturar pescado vivo.
Las 2 crías de foca gris, ya son capaces de capturar presas vivas.
Una vez estén listas (aproximadamente a mediados o finales de junio), serán marcadas por satélite y liberadas desde el Parque Nacional de Slowinski, al oeste de Polonia. Será interesante ver el recorrido que harán las pequeñas, especialmente la foca ocelada, pues su presencia en la región sur es muy extraña.
Provocar el incremento de las salpas (Salpa aspera), seres de aspecto similar a las medusas, para aprovechar su capacidad de absorber CO2 afectaría gravemente al equilibrio natural de los océanos, según un estudio del Instituto Oceanográfico Woods Hole (WHOI).
La naturaleza se rige por un delicado equilibrio y no percatarse de ello puede tener terribles consecuencias. Las salpas pueden ser un claro ejemplo de que el remedio puede ser peor que la enfermedad y de que cualquier ser vivo, por pequeño o simple que pueda parecer, cumple un papel importante en el equilibrio natural. Estos tunicados, del tamaño de un pulgar, pueden encontrarse en mares ecuatoriales, templados o fríos aunque no son muy conocidos. La mayor concentración de salpas habita en el océano Antártico, donde forman grandes colonias.
Los científicos han descubierto la capacidad de las salpas de fijar el dióxido de Carbono (CO2), uno de los gases de efecto invernadero, y evitan que llegue a la atmósfera. Al igual que otros animales, se alimentan de fitoplancton, una especie de pequeñas algas marinas que usan a su vez CO2 para crecer. Cuando algún ser vivo lo ingiere, también atrapa en su interior este gas. Cuando el animal excreta o muere, la mayor parte del CO2 vuelve a liberarse. En cambio, los excrementos de las salpas se transforman en pequeñas bolas que se hunden, al igual que sus cuerpos al morir.
Por ello, podría suponerse que provocar su aumento sería muy útil para combatir el cambio climático. Sin embargo, su multiplicación inducida alteraría el equilibrio natural de los océanos y causaría graves efectos. Ricardo Aguilar, director de investigación y proyectos de la organización conservacionista Oceana, recuerda que en los últimos años se ha producido un incremento elevado de las propias salpas o de las medusas, por falta de vertebrados, lo que está generando otros problemas y no está ayudando a reducir el cambio climático.
Los científicos han descubierto que el aumento del número de salpas en el océano Antártico está relacionado con el descenso del krill, un pequeño crustáceo básico en la dieta de las ballenas, así como de otros animales.
Científicos australianos de la organización de investigación CSIRO y de la Universidad australiana de Nueva Gales del Sur emprendieron una expedición el año pasado para estudiar a estos seres en la costa este de Australia. Los investigadores descubrieron que su número era diez veces superior a los primeros registros de hace 70 años.
Por ello, Aguilar explica que el incremento provocado de las salpas afectaría aún más al equilibrio del ecosistema, ya que competirían por los mismos recursos que otras especies importantes que también se alimentan de plancton, por lo que reducirían su número.
Asimismo, el experto de Oceana recuerda que otros organismos también pueden fijar el CO2, pero que en cualquier caso, concluye Aguilar, los océanos tienen sus limitaciones y su nivel de saturación ya es muy alto.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) han intervenido en Huelva más de 11 toneladas de aletas de tiburón valoradas en 136.800 euros en una nave clandestina donde se secaban para ser exportadas a Hong Kong. Estas aletas procedían de la provincia de Lugo y hasta el momento se desconoce el caladero de orígen y la legalidad de estas capturas (noticia ampliada en: Europa Press).
Es importante recordar que España es el país que captura más tiburones de Europa y uno de los líderes mundiales en pesca y exportación de aletas al continente asiático.
Para más información sobre la pesca de tiburón haz click aquí.
”El día 27 de marzo, durante la travesía de Formentera a Sòller que realizamos con motivo de la campaña educativa del Vell Marí, avistamos a un grupo de delfines mulares (Tursiops truncatus) y tres ejemplares de calderón gris (Grampus griseus).
El delfín mular se puede identificar por su cuerpo robusto y su pigmentación gris. Como se puede apreciar en las imágenes, esta especie suele ir en grupo y cuando aparece alguna embarcación le encanta jugar con las salpicaduras que se crean en la proa.
Los calderones son cetáceos un poco mayores que los delfines y se caracterizan por la morfología de su cabeza, de forma globosa como si se tratara de una olla. En su cuerpo se pueden apreciar marcas de color blanquecino muy características de la especie”
El pasado sábado dos de mayo nos añadimos al equipo de buzos del Centro Oficial de Investigaciones Subacuáticas de Marbella para colaborar en la limpieza de fondos del puerto.
Desde las 10:00 horas, junto con otros cuarenta voluntarios, inspeccionamos los fondos del puerto. Fuera del agua, otras 20 personas ayudábamos a extraer los distintos objetos que se iban encontrando. No os podéis llegar a imaginar todo lo que pudimos sacar del puerto: baterías, un inodoro, una nasa, teléfonos móviles, vasos, botellas..
Cuando se terminaron los trabajos de limpieza, se organizó una merecida barbacoa en la que tomamos parte y se hizo una entrega de premios para los buceadores.
Las poblaciones de grandes tiburones pelágicos están disminuyendo en numerosas partes del mundo y, especialmente, en el Mar Mediterráneo. Este tipo de tiburones se encuentran en peligro de extinción debido a la sobrepesca, la degradación del hábitat y la lenta tasa de recuperación de sus poblaciones. Las consecuencias de la pérdida de estos grandes depredadores son de una magnitud desconocida, se prevé que afecten a todos los niveles tróficos de los ecosistemas marinos y que tenga graves consecuencias tanto a nivel ecológico como económico.
Algunos estudios científicos, como el publicado por Feretti et al. 2008, han calculado que en los últimos años, en el Mar Mediterráneo, se ha producido un declive del 99% en la abundancia de especies como el tiburón martillo (Sphyrna zygaena), la tintorera (Prionace glauca), el marrajo (Lamna nasus y Isurus oxyrhincus) y el tiburón zorro (Alopias vulpinus).
El pasado 20 de Abril unos pescadores de la provincia de Barcelona capturaron un ejemplar de tiburón zorro de 182kg en una red de trasmallo. Esta especie se encuentra listada como Vulnerable en la lista roja de la IUCN y, aunque en el pasado era una especie abundante en el Mediterráneo, es actualmente poco frecuente capturar a estos individuos en esta zona.
El ejemplar se vendió a 4€/Kg (realmente, su valor ecológico es mucho mayor al económico) y fue etiquetado como ‘VARIOS’. Que implica este etiquetado erróneo? Pues que la captura de este ejemplar no consta en las estadísticas de pesca, "nadie sabe que se capturó" y esto dificulta mucho el estudio del estado de las poblaciones y la implementación de medidas de gestión eficaces. La falta de datos fiables sobre la captura de tiburones es un problema detectado tanto en pesquerías locales, como a nivel internacional, y podría ser reducido mediante un cambio en la metodología de clasificación y etiquetaje de las capturas.
La Fundación CRAM, con la colaboración de Obra Social de Caja Madrid, ha llevado a cabo un proyecto, que se presentará muy pronto, para dar a conocer la magnitud del error de etiquetaje de elasmobranquios (tiburones y rayas) en las pesquerías catalanas con el objetivo de demostrar la existencia de este problema e implementar medidas mitigadoras.
Muy pronto os facilitaremos más información sobre este tema…estar atentos!!
Muchas gracias a G.Sabates por habernos facilitado las fotografías del tiburón zorro. Es muy importante tener constancia, y si es posible tomar fotografías, de las capturas que se consideren raras y de especies amenazadas para poder reportar su avistamiento o desembarco.
Julia Santana Garçon Área Conservación Fundación CRAM
Los pasados 16 al 18 de abril, la ciudad marroquina de Oujda acogió el II Encuentro Internacional sobre Conservación y Desarrollo Sostenible en el mar de Alborán; un congreso que ha finalizado con una declaración de intenciones conjunta para elaborar una estrategia de conservación entre administraciones y ONGs firmantes de Argelia, Marruecos y España.
El encuentro fue organizado por al Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) y el "Institut National de Recherche Halieutique" (INHR) y durante tres días reunió a más de 200 expertos que reconocieron la importante diversidad y riqueza ambiental de la región, su vulnerabilidad y su importancia social y económica.
Las recomendaciones finales resaltan al importancia de la sensibilización para fomentar la conservación y incluyen la creación de una área científico tecnológica de investigación sobre biodiversidad marina y el establecimiento de una Red de Desarrollo Sostenible de Alborán.
”El día 27 de marzo, durante la travesía de Formentera a Sòller que realizamos con motivo de la campaña educativa del Vell Marí, avistamos a un grupo de delfines mulares (Tursiops truncatus) i tres ejemplares de calderón gris ((Grampus griseus).
El delfín mular se puede identificar por su cuerpo robusto y su pigmentación gris. Como se puede apreciar en las imágenes, esta especie suele ir en grupo y cuando aparece alguna embarcación le encanta jugar con las salpicaduras que se crean en la proa.
Los calderones son cetáceos un poco mayores que los delfines y se caracterizan por la morfología de su cabeza, de forma globosa como si se tratara de una olla. En su cuerpo se pueden apreciar marcas de color blanquecino muy características de la especie”
La Sakhalin Energy Investment Company, firma rusa dedicada a la explotación y exportación de crudo y gas, ha decidido proteger a las ballenas grises (Eschrichtius robustus) cesando sus investigaciones sísmicas en la costa de la isla de Sajalín, área de alimentación de esta especie.
Esta decisión sigue la recomendacióndela Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) que había reclamadouna moratoria de las actividades sísmicas asociadas a la extracción de crudo y gas en esta isla rusa del Pacífico, al observar cambios en la población y distribución de una especie de cetáceo que considera "seriamente amenazada".
Con una población de 130 ejemplares, la llamada ballena gris occidental afronta graves amenazas debido, principalmente, a las actividades extractivas de la zona. Según los científicos, la muerte anual de una hembra de ballena gris activa para la reproducción, podría conducir la población de la zona a la extinción en 15 años.
